Me estoy volviendo una hortera.
Esta mañana, justo 10 minutos después de levantarme, he sufrido una aparición frente al espejo.
De repente me he visto a mi misma combinando ciertos colores de tal forma, que me ha producido una tremenda impresión. Zapatos rojos, calcetines negros, pantalones vaqueros, camisa azul eléctrico con bordados en todos los colores imaginables, jersey de lana beige negro y blanco. Wauuuuuu
Y ayer? noooo. Ayer fueron los mismos zapatos rojos, calcetines marrones, pantalones verdes, camiseta blanca y jersey celeste….pufff
Lo peor de todo es que no me importa en absoluto. Esto de vivir ajeno a modas y a colores que combinan, la verdad es que me encanta. Además aquí siendo guiri se te está permitido ir como quieras. Si no que se lo digan a toda la panda de gringos que vienen en chanclas y calcetines a visitar nuestra tierra, o que se pasean en Potosí (8ºC temperatura media) en bermudas y tirantas…
¿Sería posible vivir así? vivir sin importar que envoltorio llevamos encima… sin importar que envoltorio lleven los demás…sin modas…sin clasificar a las personas por su apariencia…sin potenciar el sistema consumista gastando los ahorrillos del mes en trapos…invirtiendo el tiempo dedicado al cuerpo, a digamos…la metafísica por ejemplo, ¿por qué no? …uhm suena a utopía. Pero, ¿saben qué? Adoro las utopías!